Escapar

Las gotas de sudor, rezumaban por cada poro de su piel, sus glándulas trabajaban incesantemente y el simpático, se expandía sobre- excitado... Mientras corría, sólo pensaba y sentía su adrenalina, activando a sus neuronas rebosantes de ego .

Elegía sus lycras más preciadas, camiseta a cuerpo, se calzaba sus deportivas e iniciaba la marcha. Quizás, porque era la actividad más similar a volar, se había convertido en su deporte favorito. ( Deporte cómodo entre todos aquellos que no precisan ( al menos, durante algún momento) la necesidad de mantener los pies pegados al suelo...

Pero tal vez no había observado un detalle...

“ Cada día es una carrera en la que alma del individuo, debe decidir permanecer o huir , a sabiendas que nadie puede escapar realmente de sí mismo”

* El sudor permanecía junto a su aroma, aunque ya no era visible. Entonces fue consciente de la única carrera que quizás no había corrido. La de enfrentarse a la verdad.